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La petrolera de bandera nacional informó la creación de “YPF Litio” y, con esta iniciativa, el país da un paso sólido en la exploración y explotación de un recurso estratégico. Junto con Bolivia y Chile nuestro país posee una de las mayores reservas del mineral que se usa para producir baterías. Un negocio que puede generar 3.500 millones de divisas anuales.
La idea sobre la creación de “la YPF del litio” que circulaba en pasillos de edificios gubernamentales desde hace tiempo, dejo de ser una metáfora con el anuncio del desembarco de la petrolera de bandera nacional, que comenzará a gestionar el recurso de forma estratégica.
La iniciativa, que -de no haber sido por la pandemia- podría haber avanzado en el inicio del gobierno de Alberto Fernández, se encausó en las últimas semanas hasta que, finalmente, por estos días la petrolera de bandera nacional dio detalles sobre la integración vertical de la cadena de valor del litio, con la misión de “controlar el proceso tecnológico y el know how desde la exploración hasta la fabricación de celdas y baterías”.
Con el impulso del titular de la compañía, Pablo González, la creación de YPF Litio, que ya fue aceptada por el directorio de la petrolera, le permitirá incursionar en un rubro que fue analizado por las gestiones anteriores de Miguel Galuccio, y la de su sucesor Miguel Gutiérrez, con el fin de “acomodar la industria a un nuevo tipo de energías, con una visión de futuro”.
Con una inversión de 2,5 millones de dólares que serán financiados en un 60% por el Ministerio de Ciencia y Tecnología y el 40 restante con recursos propios, una planta, pionera en la región, comenzaría a producir en mayo del 2022.
Esta primera etapa, será costeada a partir de la demanda de baterías por parte del Ministerio de Defensa y de la Provincia de Buenos Aires, quienes las destinarán a sus instalaciones de energías renovables.
La creación de una empresa estatal dedicada a la explotación de litio se apoya en el artículo 124 de la Constitución Nacional que establece que «las provincias podrán crear regiones para el desarrollo económico y social y establecer órganos con facultades para el cumplimiento de sus fines y podrán también celebrar convenios internacionales en tanto no sean incompatibles con la política exterior de la Nación y no afecten las facultades delegadas al Gobierno federal o el crédito público de la Nación”.
“El interés, seguimiento e investigación del litio no es novedad en YPF, quizás resulta novedoso la acción de conformar YPF litio”, señaló a N&P, Hernán Letcher, economista y asesor del titular de la compañía. “El objetivo es trabajar conjuntamente con Y–Tec, que es la apuesta que tiene YPF para el desarrollo tecnológico, en los distintos eslabones de la cadena del litio”, contó.
Además, señaló que existe particular interés en la exploración y explotación del mineral a través del trabajo articulado con las provincias que resulta “central y trascendente”, según calificó.
Respecto a las expectativas, Letcher dijo que luego vendrá la etapa de realización de baterías, pero confirmó el avance de una “experiencia piloto” en la que ya se viene trabajando, para comenzar a producir celdas y baterías de litio, en una planta que será la primera en América Latina, y la compañía buscará escalar.
Desde hace años la Argentina extrae carbonato de litio, actualmente cerca de 37.500 toneladas de por año, que se exportan, principalmente a China para su uso en la producción masiva de baterías, que al mismo tiempo el país importa para ensamblar en distintos artefactos.
A partir de las inversiones anunciadas en infraestructura y desarrollo tecnológico, el gran desafío será aportar valor agregado en origen, a través de la generación de baterías de litio terminadas íntegramente en el país. “Tenemos que pasar del prototipo a la escala industrial. Y para eso debemos desagregar el paquete tecnológico, entenderlo. Las netbook del plan Conectar Igualdad tiene las baterías integradas localmente, pero las celdas se importan. El objetivo ahora es producir esas celdas de litio en Argentina”, describió Eduardo Dvorkin, presidente de Y–TEC.
Según datos de 2018 del Servicio Geológico de los Estados Unidos (USGS) la Argentina cuenta con 1/7 de las reservas de litio, lo que la ubica en la cuarta posición global, y aporta cerca de 1/6 de la producción total, lo que posiciona al país en el tercer lugar en el ranking mundial.
Argentina comparte con Bolivia y Chile uno de los mayores reservorios mundiales de litio, un metal alcalino conductor de calor y electricidad y el de mayor capacidad de almacenamiento de energía por unidad de peso. El denominado “triángulo del litio” tiene potencial para elevar la producción de las 37.000 toneladas por año actuales a más de 370.000.
Negocio en auge
En el partido bonaerense de Ensenada, en la sede de Y-Tec, Letcher junto al Eduardo Dvorkin y Santiago Sacerdote, presidente y gerente respectivamente del brazo tecnológico de YPF, brindaron detalles sobre los pasos que dará la nueva compañía que, fundamentalmente, creará la primera planta industrial de baja escala de la región, con una inversión de casi 5 millones de dólares.
La fábrica, que ya empezó a desarrollarse en un terreno de la Universidad de La Plata, debería comenzar a funcionar en el segundo semestre de 2022, en tres turnos de trabajo con una producción de 13 Mw/hora por año, lo que resulta equivalente a equipar las baterías para unos 45 colectivos eléctricos.
De acuerdo a los resultados se determinará si se le da mayor escala a la producción que puede generar ingreso de divisas millonarios para el país y alcanzar el nivel de las grandes gigafactorias que ya existen en Estados Unidos Europa China Japón o Corea, y abrir el camino a otras iniciativas a partir de esa tecnología.
“El desarrollo de YPF litio realmente no es el todo del posicionamiento de la electromovilidad”, opinó Pablo Rutigliano, titular de la Cámara Latinoamérica del Litio y explicó que “se necesita algo más”. “Así como tenemos un mercado de metales que hoy por hoy está desarrollándose y tratando de amalgamar y conjugar los precios, lo que se tiene que defender son los precios, que son los que van a formar las estructuras, la cadena de valor”.
El especialista se mostró a favor del crecimiento, pero señaló que “todos los salares, los recursos mineros que hay en Argentina son de pymes que no tiene la capacidad financiera para desarrollarse”, dijo y señaló que “no lo van a volcar a una compañía público-privada”.
Para Rutigliano resulta clave que los productos que se extraigan sean transformados en el país para poder construir la cadena de valor, donde también jugarán u rol importante los contratos que se generen tanto su cumplimiento como las exigencias. “Las estructuras cierran cuando se ven funcionar”, agregó.
Por su parte el titular de YPF durante la última reunión de directorio planteó que “se tiene que pensar en diversificar el horizonte de negocios” de la compañía lo que se consolida en la creación de la figura societaria en relación al litio, y que permitirá “sumar un horizonte de inversiones para los accionistas”.
«También se cuenta con el acompañamiento de las provincias productoras que están a disposición de YPF y creen que con el liderazgo que tiene en diversos rubros, no solamente la producción, es fundamental para llevar adelante nuevas figuras asociativas que diversifiquen el horizonte de negocios”, dijo y aseguró que la iniciativa de creación de la nueva empresa “tuvo el acuerdo del presidente Alberto Fernández y de los gobernadores” de las provincias que cuentan con las mayores reservas de litio del país, como Jujuy, Salta y Catamarca.
En paralelo, estas provincias que conforman la Mesa Nacional del Litio, trabajan para generar «políticas públicas a nivel nacional» que acompañen al crecimiento de la industria local del mineral y, durante el último encuentro, acordaron avanzar en una declaración conjunta destinada a promover la competitividad y el desarrollo regional.
“El proyecto de movilidad eléctrica va a generar un antes y un después en la matriz productiva, energética y de transporte en nuestro país”, dijo Gerardo Morales, gobernador de Jujuy, luego de firmar un Memorándum de Entendimiento con la empresa china Ganfeng Lithium Co. Ltd con el fin de instalar una fábrica de baterías de litio para movilidad sustentable en el norte del país.
Para las provincias el impulso de la industria no sólo favorece la extracción y comercialización sino la creación nuevas figuras asociativas que diversifiquen el horizonte de negocios y permitan ampliar la cadena de valor.
En la órbita nacional, el presidente de YPF, Pablo González, y el CEO de la compañía, Sergio Affronti, mantuvieron una reunieron con el Embajador de la República de la India en la Argentina, Dinesh Bhatia, con el objetivo de reforzar el vínculo internacional de colaboración en proyectos de litio, según indicaron desde la compañía.
El escenario es sumamente alentador para la Argentina que cautiva 19,3 millones de toneladas de litio según la USGS, lo cual representa el 22% del total mundial. “La Argentina ofrece el caso más prometedor para la expansión de la industria del litio, ya que busca oportunidades para acelerar la recuperación de su economía”, destacó un informe regional del Centro de Estudios Estratégicos Internacionales.
En 2020, la Argentina produjo 6.200 toneladas, ocupando el cuarto lugar en la producción global, detrás de Australia, Chile y China. En las condiciones actuales, se estima que el litio podría llegar a aportar a la Argentina hasta 3.500 millones de dólares anuales en exportaciones.
por Ana Belén Ehuletche
FUENTE: NEGOCIOS
